Una de las preocupaciones que tienen los pacientes con epilepsia y sus familiares es la ocurrencia de crisis convulsivas durante la noche, que pueden pasar desapercibidas y asociarse con complicaciones serias, siendo el SUDEP (muerte súbita en epilepsia) la más grave. Se sabe que el SUDEP es menos frecuente si se supervisa al paciente y se le estimula justo después de las crisis. Existen algunos dispositivos de detección (por ejemplo algunas pulseras inteligentes) que pueden avisar a los cuidadores, pero no todos los pacientes toleran bien llevar este tipo de dispositivos.
Recientemente se han desarrollado aparatos en los que las crisis se detectan mediante sistemas de video, entrenados para detectar movimientos típicos asociados a una crisis. En un estudio publicado recientemente se analizaron 24 registros nocturnos de 12 pacientes con epilepsia que vivían en una residencia, y registros de 50 crisis convulsivas seleccionadas al azar. Previamente los autores habían analizado un grupo de crisis convulsivas típicas y desarrollado un algoritmo para detectar los movimientos con determinado rango de frecuencia y amplitud que se ven en este pico de crisis. Con dicho algoritmo, los autores fueron capaces de detectar el 100% de las crisis y además pronto, ya que el 78% de las crisis se detectaron en menos de 10 segundos. Además de crisis convulsivas propiamente dichas, se detectaron otros tipos de crisis que se asocian a un exceso de movimiento, por ejemplo crisis hipermotoras del lóbulo frontal.
Estos hallazgos confirman la utilidad de nuevos sistemas en los que la tecnología va a ayudar a monitorizar mejor las crisis de los pacientes y a mejorar su seguridad.